Dos estadounidenses ACUSAN a Fuerza Tamaulipas de ROBO y AMENAZAS

Matamoros.- Dos jóvenes estadounidenses acudieron al Consulado Americano en esta ciudad para denunciar que fueron víctimas de agresiones, robó y amenazas de muerte, señalando directamente a los elementos de Fuerza Tamaulipas, hechos ocurridos horas antes de que amaneciera.

Uno de los ofendidos es Iván Denova Ramírez, de 22 años de edad, quien radica en los departamentos que se encuentran en las calles Universidad y Gabino Barreda número 2 Interior 4, mismo que a eso de las cuatro de la mañana fue víctima de las agresiones por parte de la autoridad antes mencionada, pues tras quebrar las ventanas del departamento se metieron y lo agarraron a golpes.

Según dijo Iván, pudo llamar a su hermano Ricardo, antes de que se metieran los oficiales, pues escuchaba como querían derrumbar la puerta a golpes.

Lo acusan de delincuente

Acusándolo de que era un delincuente, lo golpearon, poniéndolo de rodillas y esposándolo además de pedirle que se agachara para que no los viera, aunque éste logró darse cuenta de que varios de ellos andaban encapuchados y que uno de ellos se quitó el chaleco para poder golpearlo, explica la víctima mientras mostraba sus muñecas marcadas por las esposas que le pudieron.

Además de los golpes que le dieron, le causaron un gran desorden en todo el departamento, pues estuvieron buscando entre sus pertenencias y dejaron todo regado, además de que le robaron su Xbox One, su celular iPhone 6 plus y el módem del internet, pues pudieron haberlo confundido con un disco duro de cámaras de seguridad, comenta el golpeado.

Fue en ese entonces que su hermano Ricardo, de 19 años, también originario de los Estados Unidos, llegó al departamento, viendo a las patrullas de Fuerza Tamaulipas afuera, dirigiéndose con los oficiales para identificarse como ciudadano americano, pero estos le preguntaron a qué se dedicaba y reciben como respuesta que tanto él como el joven al que estaban golpeando, trabajaban en una empresa de reciclaje industrial, la cual es propiedad de su padre.

Ricardo comenta que fue entonces que todos los oficiales se salieron del departamento y lo subieron a la fuerza a una de sus unidades, cubriéndole la cabeza con su propia playera, mientras que un oficial se llevaba la camioneta Mazda en la que llegó.

Aunque no pudo ver por dónde lo “pasearon”, después de media hora le entregaron su camioneta cerca de la tienda Walmart, para dejar que se fuera.

Este fue el segundo incidente que sufrieron, pues hace aproximadamente un año, fueron víctimas en una situación similar con elementos de la Policía Estatal

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