AMLO incompetetente contra el NARCO: Señor Presidente, México esta en llamas

La captura de un narcotraficante buscado y su posterior liberación después de la presión del Cartel de Sinaloa sentó un precedente peligroso, revelando que el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y su gabinete eran impotentes contra los narcoterroristas que controlan la mayor parte del país. 

El episodio plantea serias preguntas sobre el papel de México como socio en la lucha del gobierno estadounidense contra los carteles.

Esta semana, hombres armados del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG) tendieron una emboscada y asesinaron a 13 policías en una demostración de fuerza con vehículos blindados, granadas propulsadas por cohetes, rifles de calibre .50 y otras armas.

La violencia se produce en un momento en que AMLO ha reasignado a la mayoría de los marines del país a ciudades costeras, lejos de los puntos críticos de los carteles. 

Durante años, los infantes de marina mexicanos se ganaron la reputación de ser una fuerza de combate confiable en un país donde gran parte del aparato de seguridad y los políticos sirven a los señores del crimen, según el reciente testimonio del juicio de Joaquín "El Chapo" Guzmán.

La retirada de las fuerzas militares, además de la retórica de AMLO sobre no luchar contra la "violencia con violencia" del cártel, llegó a un punto de inflexión el jueves por la tarde cuando las fuerzas federales capturaron y luego liberaron a Ovidio "El Ratón" Guzmán López, uno de los 10 hijos de El Chapo. 

El viernes, AMLO reveló que su personal de seguridad tomó la decisión de liberar a Guzmán para preservar la paz después de que el Cartel de Sinaloa desplegó cientos de hombres armados para aterrorizar a Culiacán. De todos modos, la violencia continuó durante horas después de la liberación del heredero.

El combate experimentado en Culiacán no es nuevo. Durante años, los carteles que operan en ciudades fronterizas cercanas a Texas se han transformado en fuerzas paramilitares capaces de superar a las autoridades . 

El acceso a potencia de fuego, artillería y explosivos empuja a las organizaciones criminales más allá de los simples traficantes de drogas a facciones capaces de realizar tácticas terroristas como las que se ven en las zonas de guerra del Medio Oriente.

Durante su conferencia de prensa del viernes, AMLO dijo que su gobierno se centró en luchar por la justicia social y mejorar las condiciones de vida del país frente a la amenaza narco. 

El presidente dijo anteriormente que denunciaría a los delincuentes a sus madres por azotes e incluso alentó a los civiles a gritar "Fuchi Guacala" (¡qué asco!) Al ver a pistoleros para avergonzarlos y mejorar su comportamiento.

Señor Presidente, México esta en llamas.

Breitbart Texas

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