![Valor por Tamaulipas: [RED INTEGRAL DE REPORTE DE SDR]](https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEhXxluNGd7-RtT3FKqo_fwBYDK_IPOMY4erKMiBmTUWG2ixdaglNm3zAh9ArsHhn7gZ56kmiHBJJhey-RhB1RlVKXDHYw2vDrfZ9Ucq4n0YwEIy8_NiDaVxQOKCfxeC-8JlWG13SLSJ6Xg/s1600/ValorPorTamaulipas.jpg)
Veracruz.- Regresó a Veracruz, un héroe de México. Un profundo dolor y llanto invade la vida de la señora Martha al enterarse por autoridades, el lamentable deceso de su hijo, el menor, durante el enfrentamiento entre un cartel y el ejército mexicano en la ciudad de Tamaulipas.
El joven Cruz José H.A. de tan solo 27 años de edad, quedó sin vida en la línea de combate, cuando cumplía su deber como soldado al empezar un enfrentamiento con hombres del Cartel del Noreste.
Apolinar "Papuchin" como le decían de cariño sus allegados, originario de Veracruz; tenia aproximadamente ocho años de haber ingresado al ejército, su pasión siempre fue formar parte de las fuerzas armadas pero nunca se imagino que sus alas serían cortadas en poco tiempo.
El joven Cruz José H.A. de tan solo 27 años de edad, quedó sin vida en la línea de combate, cuando cumplía su deber como soldado al empezar un enfrentamiento con hombres del Cartel del Noreste.
Apolinar "Papuchin" como le decían de cariño sus allegados, originario de Veracruz; tenia aproximadamente ocho años de haber ingresado al ejército, su pasión siempre fue formar parte de las fuerzas armadas pero nunca se imagino que sus alas serían cortadas en poco tiempo.
El joven soldado creció con duros problemas económicos pero al ser enlistado a las tropas mexicanas su vida empezó a dar un giro, comenzó ayudar a su madre económicamente y construyó su casa, un sueño que logró con el trabajo que siempre le gustó.
Martha es invadida por los lindos recuerdos que tenía con su hijo y hoy su corazón se parte en mil pedazos al ver que su Vástago ya no llegara a darle un beso en la mejilla y un abrazo, si no que ahora vendrá su cuerpo inerte en un ataúd para darle una cristiana sepultura, en su tierra que lo vio nacer.
Martha es invadida por los lindos recuerdos que tenía con su hijo y hoy su corazón se parte en mil pedazos al ver que su Vástago ya no llegara a darle un beso en la mejilla y un abrazo, si no que ahora vendrá su cuerpo inerte en un ataúd para darle una cristiana sepultura, en su tierra que lo vio nacer.
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