A pesar de que la mayoría de los Policías Estatales abatidos o heridos en batallas contra la delincuencia organizada dieron su vida para que en Tamaulipas se vivieran momentos de paz, el Gobierno del Estado no ha cumplido su obligación con las familias de estos agentes.
Los reclamos han sido constantes, pero sin eco.
Quienes de la noche a la mañana se convirtieron en jefas de familias, tienen que batallar para el sustento de sus hijos, ante el nulo apoyo del Gobierno del Estado de Tamaulipas, a ese por el cual los policías dieron su vida o se encuentran postrados en cama para el resto de sus vidas.
Desde el abandono, estas familias suplican que si el Gobernador del Estado, Francisco Javier García Cabeza de Vaca no los atiende, al menos lo haga el titular de la Secretaría de Seguridad Pública, Augusto Cruz Morales.
“Somos muchas esposas que no hemos cobrado el seguro de vida, estamos en el total desamparo”, señalo una ex esposa de un policía caído.
Precisaron que ya no aguantan más burlas del Gobierno Estatal y por eso exigen les sean entregados los apoyos para mantener a sus hijos.
“Es una mentira de que apoyan a las familias de los policías, por ejemplo a nosotros ya no nos ayudaron desde que mi esposo está en cama, luego de que fuera herido en la frontera”, reveló otra ama de casa.
El grupo de mujeres que denunciaron esta anomalía, mencionaron que de seguir en las mismas penumbras con el Gobierno del Estado de Tamaulipas, denunciaran las irregularidades al Gobierno Federal que encabezará en unos meses más Andrés Manuel López Obrador.
DENUNCIAN ABUSOS DE MANDOS
Durante esta semana, agentes de la PEA denunciaron los abusos que cometen algunos mandos, como el comisionado en Río Bravo, Ricardo Martínez Ruiz, a quien señalan presuntamente de poner a cuota a los elementos a su mando.
En otros municipios, ha sido constante la acusación de que a los agentes les son recortados los viáticos, o en su defecto nunca les llegan, pero que terminan en manos de sus mandos.
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